La Delegación III del Colegio de Gestores de la Provincia de Buenos Aires, en el marco de la conmemoración del Bicentenario de la Declaración de Nuestra Independencia; invita a toda la comunidad al acto y desfile cívico-tradicionalista frente a la Municipalidad de Lomas de Zamora.
La Delegación III, como parte integrante de la Comisión Organizadora convida a los Colegiados y a la ciudadanía en general a participar fervientemente de la jornada, por ser éste el municipio que alberga nuestra casa.
A partir de las 9.45hs, se llevará a cabo la bendición de nuestra insignia Patria; seguidamente, se realizará un gran Desfile Cívico Tradicionalista que estará presidido por el Intendente Martín Insaurralde y del que participarán escuelas, instituciones, clubes, colectividades, centros de jubilados, grupos tradicionalistas, y representantes de la comunidad del partido.
La Banda Municipal estará acompañando con su música durante todo el desfile y a los vecinos se les entregará banderitas y escarapelas para vivir la jornada.
En tanto, a partir de las 14hs. los festejos continuarán con una gran fiesta en la plaza, con la presentación de diversos espectáculos artísticos y musicales hasta las 21hs.
Mientras que, en el Teatro del Municipio, desde las 21hs., se llevará a cabo una obra de teatro en alusión a la fecha.
¡Los esperamos!
Reflexiones sobre el Bicentenario de la Declaración de la Independencia
Los grandes aniversarios son ocasiones propicias para la reflexión y los balances. Ser contemporáneos del Bicentenario de la Independencia de la Patria es un verdadero privilegio.
Desde alguna perspectiva, esta celebración nos interpela. Si en 1816 nos independizamos del yugo español, ¿De qué debemos independizarnos hoy? ¿Cuáles son nuestras dependencias actuales? ¿El individualismo? ¿La indiferencia? ¿El espíritu sectario? ¿La corrupción? ¿El narcotráfico? ¿La pobreza? ¿Le falta algo a nuestra independencia? La respuesta corta es sí. Pero como dice el Dr. Espeche Gil: “Eso no debería llamarnos la atención porque la independencia es un proceso permanente. No es el fin del camino sino el camino mismo de independizarse”.
El 9 de Julio de 1816 Nuestra Patria vislumbró la respuesta afirmativa por parte de los diputados presentes en Tucumán para conseguir la unión de las provincias con el objetivo de lograr ser un estado libre e independiente.
Muchas mujeres participaron y acompañaron este proceso en sus inicios para darle forma. El patriotismo, sagacidad, lucha y coraje por los derechos y valores de una nación fueron los estandartes que sostenían aquellas que, a veces desde las sombras por capricho de quienes cuentan la historia, no recordamos habitualmente. Nombremos a Remedios del Valle, Capitana que acompañó la gesta del Alto Perú; M. Magdalena Damasa Güemes, “Macacha”, adhiriendo junto a su hermano el general, al ejército de gauchos independentistas: Juana Azurduy, hija del país Boliviano, defendió la Patria Grande y fue reconocida como Teniente Coronel del Ejército Argentino.
Estamos marcados por un largo camino de desencuentros. Aunque las diferentes miradas aportan diversidad, que las cosas que nos distingan, no necesariamente nos deben separar. Hay que terminar con la versión maniquea de dividir a los argentinos en réprobos y elegidos.
La concordia política, que es uno de los contenidos del Bien Común, es el recurso para superar nuestras divisiones y debiera ser un objetivo a alcanzar para terminar con el estado de confrontación permanente. Hay que recuperar la amistad social en estas épocas de fractura. Debemos reconocernos como hermanos, hijos de un padre común, para que esta fraternidad sea el fundamento de la solidaridad social.
En la Nación debe reinar la confraternidad entre todos sus habitantes por todo ese acerbo compartido, independientemente de que pensemos distinto en temas opinables. El desafío comunitario de una sociedad justa y democrática es empezar a encontrar puntos de encuentros, basados primero en la persona como sujeto de derechos y en una justicia redistributiva que recree el sentido de equidad social como un desafío impostergable de este momento histórico.
Lo que finalmente hay que comprender es “que no podemos ser felices unos sin los otros y ciertamente nunca unos contra los otros”.
Por ello, mantengamos el concepto de Patria intacto ya que, sin duda, un país libre e independiente significa luchar, defender, respetar los derechos, valores e ideales que como Argentinos nos representan y caracterizan ante cualquier figura u opinión diferente, no es solo ponernos los colores de nuestro país en el pecho en actos o celebraciones, es mucho más que eso!….Es hacer valer nuestra historia, demostrar el respeto de pertenecer a nuestra Nación.
¡Dejar de ser simples habitantes para ocupar el lugar de Ciudadanos!
Graciela E. Assaf de Viejobueno.